Como la naturaleza de un río
que se abre desde la profundidad
hacia las rocas,
y se fija, impetuoso, hacia otra,
y se encuentra en la caída:
desafiante y feroz,
y, a la vez, desarraigado y disperso.
¿Cuál es mi esperanza?
Que tú me esperes.
Que digas que tienes sed y me mires.
Que yo, sola súplica incesante,
me calme en ti.
Aunque me crezcan árboles frondosos en los márgenes,
solo quiero caer para esa suerte.
Leyddy Dhianna Reynoso Caraballo.